La reproducción de nuestras ostras se lleva a cabo en un entorno controlado, dentro de nuestra incubadora de ostras ubicada en Vendée. Esta instalación permite que las larvas se desarrollen en un ambiente saludable y libre de depredadores. El agua de mar utilizada se filtra y purifica.
En la incubadora, tres misiones principales concentran la atención de todo el equipo: la maduración de los progenitores, la producción de fitoplancton y la cría de larvas.
Los progenitores (ostras progenitoras machos y hembras) son seleccionados en función de su origen, resistencia, apariencia, cualidades organolépticas, crecimiento, etc.
Después de esta selección, estas ostras adultas son limpiadas cuidadosamente y colocadas en estanques de cría a un ritmo bimensual, desde noviembre hasta julio. Este desfase temporal permite preparar ostras maduras desde enero hasta septiembre. De esta manera, es posible realizar varias puestas de huevos al año, adaptando la temperatura y la cantidad de alimento.
Las temperaturas cálidas permiten adelantar la madurez para las primeras puestas, mientras que las temperaturas frías retrasan el proceso de maduración hasta principios de otoño. Todos los lotes son monitoreados y se realizan análisis sanitarios regulares para verificar su estado de salud. Las ostras son limpiadas y alimentadas diariamente con dos especies de fitoplancton (microalgas).
Gracias al suministro de agua de pozo (acuífero de agua salada), naturalmente rica en oligoelementos, cultivamos dos especies de fitoplancton: Skeletonema costatum y Tisochrysis Lutea. Distribuido para alimentar tanto a los progenitores como a las larvas, este fitoplancton, también conocido como microalga forrajera, puede ser producido tanto en interiores en salas iluminadas y climatizadas, como en exteriores en estanques iluminados con luz natural.
Estas producciones se basan en un método secuencial: cada día, un pequeño volumen de cultivo, llamado inóculo, se diluye en un volumen de agua de pozo más grande. Después de unos días, las células de algas se han multiplicado y la operación se repite hasta obtener un volumen de cultivo concentrado, suficiente para alimentar a los criaderos.
La puesta puede realizarse mediante choque térmico o por escarificación. En el primer caso, los progenitores maduros se colocan individualmente en pequeños recipientes y se someten a variaciones de temperatura que permiten la liberación espontánea de los gametos por parte de los progenitores. En el segundo caso, los gametos (espermatozoides y óvulos) se recuperan mediante la escarificación de la gónada (usando un bisturí). Los individuos luego son sexados por observaciones microscópicas y las hembras se separan de los machos.
Durante una puesta diploide, los óvulos se mezclan con los espermatozoides de las ostras macho diploides. En el caso de una puesta triploide (ostras no fértiles), los óvulos se cruzan con los espermatozoides de los machos tetraploides, criados en nuestras instalaciones de I+D (Investigación y Desarrollo).
24 horas después de la fecundación, las larvas pasan del estadio trocófora al estadio de larva "D" (tienen la forma de la letra D). Las larvas producidas luego se crían durante unas veinte días. Las larvas se recolectan regularmente en tamices para garantizar la homogeneidad del lote y verificar su crecimiento. El agua se renueva y se alimentan diariamente con las diferentes especies de fitoplancton mencionadas anteriormente. Cuando alcanzan un tamaño de 300 micrones, las larvas pasan del estadio velígera al estadio pedivelígera desarrollando un pie que les permite fijarse. Se dice que son competentes para la metamorfosis, lo que anuncia la fase de fijación.